El gato montés, o Felis silvestris por su nombre científico, es un miembro de la familia de los felinos, común en los continentes europeo, africano y asiático. Esta especie de gato ha demostrado ser bastante adaptable, se les puede encontrar en distintos hábitats como bosques, sabanas y estepas. Los gatos domésticos que tenemos en nuestros hogares son considerados como una subespecie de los gatos monteses.
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Características más destacadas del gato montés
A pesar de su parecido con los gatos domésticos, siguen siendo felinos salvajes y tienen características propias de su especie que facilitan reconocerlos:
- La mayoría de los miembros de esta especie tienen los ojos verdes.
- Su pelaje es grisáceo y/o pardo, perfecto para camuflarse en la naturaleza.
- Son más grandes y robustos que los gatos domésticos, también su cara es más grande y redondeada.
- Su hocico es un poco más corto que el de otros miembros de la familia de los félidos, pero sigue teniendo una mandíbula muy fuerte.
- Su cola es gruesa y presenta de tres a cinco anillos de color negro, con la punta del mismo color de los anillos. Este es uno de los rasgos más característicos de esta especie.
- Como la mayoría de los felinos, es carnívoro y es muy hábil cazando.
La historia de un superviviente
Los humanos y los felinos se han relacionado constantemente a lo largo de la historia. Desde la adoración por parte de los egipcios, hasta la persecución en la época medieval, llegando a los vídeos de gatitos en internet, los gatos no han podido pasar desapercibidos.
Lamentablemente para los felinos la relación con los humanos ha sido un poco tóxica. Las amenazas que ponen en riesgo su supervivencia han aumentado drásticamente, y la gran mayoría son causadas por el hombre. La disminución de su hábitat y la caza furtiva han puesto en peligro a muchas especies de félidos. No hace mucho, en el 2013, tuvimos la triste noticia de la extinción del leopardo nublado de Formosa, víctima de la reducción de su entorno y la caza desmedida por su piel y sus colmillos.
El gato montés europeo es una de las especies que se encuentra luchando por su supervivencia. Diariamente, deben enfrentarse a todas las amenazas creadas por los seres humanos. Estos gatos deben lidiar con toda clase de riesgos tales como:
- La persecución por parte de granjeros, que utilizan técnicas ilegales como trampas y alimentos envenenados para deshacerse de ellos.
- La disminución de sus presas, producto del daño a sus territorios de caza.
- Cada vez tienen menos bosques y terrenos donde habitar. Sumado a esto, el número de carreteras en sus territorios se encuentra en aumento, esto es una nueva causa de mortalidad para su especie, ya que pueden morir atropellados al intentar cruzar.
Descuidado por la colectividad
Es triste pensar que a pesar de encontrarse amenazados, son pocos quienes han demostrado un interés real en su preservación. El gato montés europeo ha sido tan ignorado, que es casi imposible de determinar con exactitud donde se encuentran posicionados geográficamente. Aunque ya hay quienes han tomado cartas en el asunto, como es el caso del Proyecto Gato Bravo, quienes aportan información mediante el seguimiento de algunos especímenes. Pero esto aún no es suficiente, se necesita un interés mayor por parte de la comunidad europea para prevenir la desaparición de esta especie.
En resumen
Esta especie de felinos son los ancestros más directos y cercanos de los gatos domésticos, es lamentable que, aunque se encuentran amenazados, aún no se hayan tomado verdaderas acciones para protegerlos.