Números romanos y el sistema de numeración romano: explicación y ejemplos

números romanos

Durante el tiempo que duró el Imperio Romano, que en su época dorada estuvo en constante expansión, se utilizó el sistema de números romanos que había sido desarrollado en la Antigua Roma pero que fue ideado por los etruscos.

Tras la caída del Imperio Romano, en los siguientes siglos, algunas de las herencias de esta cultura desaparecieron, otras permanecieron, mientras otras cambiaron; de esta manera, nuestro idioma, el Castellano, es un Latín que evolucionó, el Derecho Romano, uno de los más importantes cuerpos de legislación de la humanidad, es la base del derecho actual, y quedan huellas de arquitectura, cultura, política y literatura.

Uno de los legados cuyo uso desapareció es el sistema de numeración romano, que fue sustituido por la numeración arábiga proveniente de la India y divulgada por los árabes; es el que usamos en la actualidad por considerarse más fácil de emplear.

Hoy en día el uso de los números romanos se ha limitado a la enumeración de capítulos de libros, para designar los siglos, en la denominación de las olimpiadas, en los actos de obras de teatro, en la designación de congresos, sucesión de reyes, papas y emperadores.

¿Qué son los números romanos?

Los números romanos son un sistema de numeración no posicional, en el que se usan letras; está conformado por siete letras mayúsculas a las que individualmente corresponde un valor numérico.  

  • I = 1
  • V = 5
  • X = 10
  • L = 50
  • C = 100
  • D = 500
  • M = 1.000

Durante el desarrollo del Imperio, los romanos implementaron un elemento novedoso, como colocar una letra detrás o delante de otra de mayor valor para restarle o sumarle, según su ubicación. Como por ejemplo, XL era 50 – 10, y LX era 50 + 10; lo que representa, 40 y 60, respectivamente.

Sin embargo, el método de asignar a las letras un valor hacía más difícil el cálculo y la solución de operaciones aritméticas, así como las multiplicaciones de cantidades grandes.

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Algunas características de los números romanos

Los números romanos son una serie de letras; a saber: I, V, X, L, C, D, M.

En la escritura de los números romanos no pueden repetirse tres veces seguidas la misma letra; así I, II, III (1, 2 y 3), el cuatro sale de la letra V antecedida por la letra I, que le resta uno a la V porque está ubicada a la izquierda, por lo tanto 4 es IV.

Pero de esa serie de letras solo cuatro de ellas pueden repetirse tres veces, que son la I (que equivale a 1), la X (que equivale a 10), la C (que equivale a 100) y la M que equivale a 1.000), de manera que están bien escritos y representados los números

  • III = 3
  • XXX = 30
  • CCC = 300
  • MMM = 3.000

Otra característica de los números romanos es que el orden de ubicación de es de mayor a menor valor, así, primero van los millares, después las centenas, luego las decenas y finalmente las unidades.

Al colocarse una raya sobre un número significa que la cifra se multiplica por mil. Por ejemplo, el número IV (4), pasa a ser 4.000 cuando se escribe IV con una raya horizontal encima.

Si el símbolo tiene dos rayas encima, se multiplica por un millón.

En números romanos el 4.000 es un número especial debido a que a partir de ese guarismo se comienza a añadir la raya horizontal sobre este para indicar que se multiplica por mil, ya que, de acuerdo con este sistema el mayor número que se puede representar con las letras es el 3.999, que se escribe MMMCMXCIX (MMM = 3000 + CM = 900 + XC = 90 + IX = 9).

La explicación de esta condición del sistema de numeración romano es que la M es la letra de mayor valor como unidad, pues corresponde a 1.000, y no puede utilizarse ninguna letra más de tres veces seguidas, de manera que el cuatro mil (4.000) no puede representarse MMMM.

¿Cómo aprender los números romanos?

Lo primero que se debe hacer para aprender a leer números romanos es saber el valor numérico de cada una letra mayúscula que compone el sistema (I = 1; V = 5; X = 10; L = 50; C = 100; D = 500 y M = 1.000).

También se debe recordar algunas reglas, como:

Los números romanos se escriben y se leen de izquierda a derecha, es decir, de mayor a menor valor.

Al colocarse una letra de menor valor a la izquierda de otra, se debe de restar.

Los símbolos V, L, D (5, 50 y 500 siempre suman y nunca se pueden ubicar a la izquierda de otro de mayor valor.

Solo se utiliza para restar el símbolo de tipo 1, como son I, X, C, M al mayor que le sigue de tipo 1 o 5, que son V, L, D.

La letra I solamente puede usarse para restarle a V y a X (a 5 y a 10).

La letra X (10) solo puede usarse para restarle a L y a C.

La letra C solo puede usarse para restarle a D y a M.

Algunos ejemplos

  • Para escribir el 55 en números romanos, este no puede ser VV; sino que, aplicando la regla de colocar una letra a la izquierda o a la derecha para restar o aumentar el valor a otra, se escribe LV; L que corresponde a 50 y V que está ubicada después de la L, es decir, a la derecha y le aumenta cinco a la L, pues el valor de V es 5.
  • XXXVI = 36, ya que X vale 10, la suma de las tres X es 30; V ubicada a la derecha le suma 5, y I también colocada a la derecha suma 1.
  • XC = 90, pues C equivale a 100 y X a 10, pero ubicada a la izquierda le resta 10 a 100.
  • DCCC = 800, ya que D representa 500 y C representa 10, repetida tres veces es 300 y ubicada a la derecha se los suma.
  • CM = 900, pues M es mil y C es 100 que al estar ubicada a la izquierda se los resta.
  • Ahora de números arábigos a romanos:
  • 950 = CML, pues M que al estar precedida por la C le resta 100, y la L que al estar a la derecha le suma 50.
  • 2020 = MMXX, la suma de las dos M es 2.000 y la suma de las dos XX es 20.

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