La batería es un elemento fundamental en un ordenador Mac. El consumo continuado provoca un desgaste que puede desembocar en una menor duración de la carga. Es una situación habitual que puede solventarse con determinadas medidas preventivas que analizamos a continuación.
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Ajustar la configuración de batería y verificar su salud
A la hora de buscar las soluciones para problemas con la batería del Mac, es fundamental saber qué aplicaciones están consumiendo más energía en tiempo real. Es un buen punto de partida para entender cómo se está usando la batería. En el apartado “Configuración de la batería” está la posibilidad de activar el modo de bajo consumo.
En ese sentido, el número de ciclos de carga que ha tenido la batería es un buen termómetro para conocer su estado. Cada ciclo equivale a una carga completa, y los MacBook suelen soportar hasta 1000 ciclos antes de que el rendimiento comience a degradarse. Para consultarlo, hay que acceder a ‘Informe del sistema’ y desplazarse hasta la sección ‘Energía’, donde se pueden comprobar los ciclos actuales y otros datos relevantes sobre el estado de la batería.
Detectar los programas que más consumen
Cuando la batería se drena rápido, es interesante saber qué aplicaciones están usando más potencia, para así buscar soluciones. En la ‘Aplicaciones’ se accede a ‘Monitor de Actividad’. Desde allí, se puede ver el consumo de cada programa y su impacto sobre el funcionamiento del ordenador. Si no se están utilizando, lo recomendable es desactivarlas para que liberen recursos que están afectando al rendimiento.
En este contexto, hay que tener en cuenta que determinados programas pueden ejecutarse desde que se inicia el sistema,. Algunas de estas aplicaciones incluso pueden ser potencialmente dañinas, como malware o scripts publicitarios, que afectan el rendimiento y agotan la batería. Se pueden utilizar herramientas de análisis del rendimiento para detectar el uso innecesario. Además, accesorios conectados por USB, como discos duros o cargadores de móviles, extraen energía del sistema. Aunque no siempre se recibe una advertencia de macOS, estos dispositivos pueden acelerar el consumo de batería.
Establecer las preferencias de energía
Una manera eficaz de ahorrar energía, especialmente cuando no se tiene acceso a un enchufe, es configurar adecuadamente las preferencias de energía. En ’Ajustes del Sistema’, ‘Pantalla de bloqueo’, se puede revisar el tiempo tras el cual la pantalla se apaga por inactividad. Cuanto menor sea este intervalo, el ahorro de batería es mayor. A continuación, hay que desactivar la función ‘Power Nap’, que permite al Mac realizar tareas en segundo plano incluso cuando está en reposo.
Brillo de la pantalla o Bluetooth
El brillo elevado es uno de los factores que más influyen en el gasto energético, así que es otro aspecto que debe revisarse. Al igual que el consumo del Bluetooth, pues si está activo, consume batería de forma constante con la simple acción de buscar dispositivos para conectarse. Si no está siendo utilizado, es mejor apagarlo para ahorrar energía.
Con estas recomendaciones, se puede alargar significativamente la duración de la batería del Mac y mejorar así su rendimiento general. Hábitos que, si se mantienen, ayudan a conservar la salud del dispositivo en el largo plazo.